Resumen
La lluvia eterna de
Jordi Sierra i Fabra es una novela realista con toques de aventura ambientada en unas tribus remotas y aisladas de África. Un volcán inactivo desde hace siglos, y hasta ahora inaccesible para aquellas gentes, está en el centro de cinco historias que se entrecruzan y tienen en común la superación de barreras, el autoconocimiento personal, la búsqueda del bien común y el amor en su versión más natural. Cuatro jóvenes de aldeas diferentes y otro quinto personaje emprenden un viaje por razones distintas a través de la selva, que se va a convertir en un difícil reto. Akuno, hijo del jefe de su tribu debe superar su prueba de madurez para suceder a su padre. Pun´i-e decide subir al volcán para averiguar la causa de las inundaciones cada vez más frecuentes que arrasan todo. Kao presencia el secuestro de la princesa de su tribu de la que está profundamente enamorado, N´Kula es arrojada por una catarata como sacrificio a los dioses y un niño blanco, salvado de un naufragio hace años por una mujer de otra de las aldeas, van a comprometerse en una causa común que cambiará el destino de aquellas tierras. De lectura muy entretenida y dinámica, cargada de tensión por el interés de los acontecimientos, la trama se enriquece con descripciones de entornos, sobrecogedores unos y paradisíacos otros, cargados de misterio y de peligros, donde unos personajes bien perfilados se ponen a prueba a sí mismos rompiendo con los ritos ancestrales, supersticiones, tabúes y canibalismo del rígido mundo en que viven. Escenas de estrecha conexión con la naturaleza y los animales salvajes resultan conmovedoras y a la vez simpáticas, suavizando las situaciones más duras y comprometidas.
